-
Arquitectos: ATA - Atelier Tiago Antero
- Año: 2017
-
Fotografías:José Campos
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Apartamento situado en la 1ª planta de un bloque de viviendas plurifamiliares representativo de la arquitectura modernista de los años 50 en la ciudad de Oporto. Exacerbado por la compartimentación, de tamaño desproporcionado y funcionalmente inadecuado para el uso contemporáneo, este espacio necesitaba una readaptación organizativa. Además, era visible una superposición de capas constructivas (suelos, revestimientos, techos y marcos de ventanas y puertas) que desfiguraba el espacio y exigía su depuración.
El espacio tenía dos elementos que nos parecía importante rescatar. El primero era una malla estructural de vigas altas, aparentemente desarticulada con la organización interior, consecuencia de la atípica distribución tipológica del edificio (constituida por pisos de grandes superficies en la primera planta y por fracciones de menores dimensiones repetidas en las cuatro plantas siguientes). El segundo elemento que nos pareció digno de conservar fue el parquet de madera de pino en espiga, que en algunos casos se cubrió y en otros se sustituyó por completo. En una primera fase, se reorganizó y redimensionó el espacio: se reconfiguraron totalmente la cocina y las instalaciones sanitarias; se redefinió la (des)compartimentación: en la zona social se creó un gran espacio donde antes había cuatro divisiones, y en la zona privada se definió un dormitorio principal con baño en suite y dos dormitorios secundarios.
En una segunda fase -más empírica y posterior a las demoliciones- se precisó la intervención en función del diseño de las vigas, a veces de forma suelta e inconexa, evocando la compartimentación preexistente, o guiada por ellas en su nueva redistribución. Se definió una estereotomía para el suelo de parquet, abarcando las líneas estructurales del techo, intercalando parquet antiguo y nuevo. Se diseñaron carpinterías (armarios y puertas) que se rigen altimétricamente por las vigas, a veces sobresaliendo y permitiendo la entrada de luz natural en los compartimentos interiores, otras veces respetando debidamente las alineaciones dominantes. Por último, introdujimos cierta dinámica en los armarios a través de algunos pequeños gestos, como puertas desalineadas, tiradores personalizados o truncamientos puntuales, para crear estanterías, zonas de lectura y ventanas interiores.